Los colores influyen mucho en nuestra vida cotidiana, su uso consciente tiene efectos espirituales y psicológicos, actúa sobre nuestro estado de ánimo, son un aliado para aumentar la seguridad en uno mismo y en consecuencia sintonizar con la suerte.
Los colores azules y verdes son fríos, relajantes y calmantes; mientras que los cálidos como el amarillo y rojo, estimulan. Alguien tímido que quiera un empujón de vitalidad puede usar el rojo para compensar la fuerza que le falta.
El negro es la ausencia de color y aporta seguridad y discreción, además adelgaza, es el color atribuido a Saturno y este planeta ayuda a consolidar los logros materiales.
Tradicionalmente atribuimos a cada día de la semana un color, es importante tenerlo en cuenta a la hora de vestirnos pues puede reforzar las influencias planetarias.
Lunes: día de la Luna, su color es el verde y el blanco.
Martes, regido por Marte: rojo.
Jueves, bajo la influencia de Júpiter, Azul.
Viernes, día de Venus; amarillo hoja, cobrizos.
Sábado, regido por Saturno, Negro. Solo o combinado
Domingo, Día del Sol. Dorado, amarillo claro.
Como lo leí en La suerte está en ti, de Mari Sol Olba.
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